Como ahorrar contratando, personal capacitado para mi evento?

Organizar un evento social, ya sea matrimonio, quinceañero, primera comunión o cualquier acontecimiento que conlleve a un festejo. Debe estar previamente pensado en lo que se quiere hacer para ese mencionado día.

Principalmente hay que saber de cuánto dinero dispongo para hacer mi evento, ese presupuesto se saca, principalmente haciendo un cronograma de lo que quiero que haya ese día.

¡Tan importante es que los invitados se sientan a gusto por la comida, el ambiente, el sitio y sobre todo la atención de estos!

Acá unas ideas para saber cómo ahorrar en la organización de mi evento.

Principiante si no tienes la capacidad, creatividad o capacidad para emprender tú mismo (a) las riendas de la organización del evento, re recomiendo que contrates los servicios de un ORGANIZADOR DE EVENTOS, ¿por qué es lo más recomendable? ¡Simplemente porque ya es una persona que se mueve en el medio y que ya sabe cómo actuar en las diferentes situaciones que se manejan al momento de organizar un evento!

Es un profesional que ya sabe por dónde empezar y cómo actuar, además esto te ayuda a disminuir costos ya que con su asesoría solo vas a comprar o solicitar lo que verdaderamente necesitas para el acontecimiento. A diferencia de hacerlo tú mismo es que muchas veces no tienes las ideas claras de lo que quieres y terminas comprando cosas que no vas a utilizar y que terminan siendo plata mal invertida.

¡Si tienes el don de cocinar y quieres ese día dar a conocer tus cualidades en la cocina! Es una buenísima forma para ahorrar dinero, porque de una y otra manera te sale un poco más barato, pero a diferencia de tu cocinar y no contratar a un chef o empresa que preste el servicio de banquetes.

Es que ellos te cobran un poquito más caro, pero la calidad del servicio es excepcional ya que ellos traen el menaje necesario para servir sus plato, postres, bebida y además meseros.

No obstante, este servicio es mucho mejor contratarlo ya que te liberas de mucho estrés, no te toca estar todo el día en la cocina y mucho menos estar pendiente del personal, pie si te piden agua o si te toca servir de mesero a ti mismo. ¡No podrás disfrutar de tú evento y terminarás muerto de cansancio, por querer ahorrarte unos cuantos pesos!